17 de septiembre de 2012

Historia de un monumento


Un monumento dedicado al beato Charles de Foucauld fue inaugurado el sábado 25 de noviembre de 2006 en su ciudad natal de Estrasburgo, conmemorando el 90 º aniversario de su muerte.
El hermano Charles de Foucauld nació 15 de septiembre 1858 en Estrasburgo, y fue bautizado en la iglesia de Saint-Pierre-le-Jeune, el 4 de noviembre del mismo año por ese motivo la escultura de bronce realizada por la artista holandesa  Daphne du Barry se encuentra en la parte delantera de dicha iglesia.
La inauguración de esta obra de arte es el resultado de mas de un año de una Asociación creada para tal fin y que definía su objetivo de la siguiente forma:
"Construir una estatua de Charles de Foucauld en Estrasburgo, ciudad donde él nació y paso su juventud, y especialmente en la iglesia donde recibió el sacramento del bautismo es una hermosa forma de reconocimiento  a su legado humano y espiritual y por el surco profundo y fructífero que ha dejado atrás. Una estatua del Padre de Foucauld es también una manera de dar a conocer esta hermosa figura y presentar el ejemplo de la vida de este hombre que tanto amó a Cristo. Erigir una estatua de Charles de Foucauld es finalmente saludar de manera especial a la tierra de Argelia, lugar donde el Padre de Foucauld ha pasado tantos años y que según él dijo se había convertido en un hijo de esa tierra.“ 
Testimonio de la escultora
Testimonio de la Sra. Daphne du Barry, escultora del monumento a Charles de Foucauld
Una semana después de mucha oración a San José, en la que le solicitaba que me concediera la gracia de realizar la escultura de un monumento religioso, recibí una llamada telefónica de un monje: el Hermano Juan Bosco del Monasterio de San José en Flavigny, escultor arte sagrado él también.  Este religioso me puso en contacto con el Sr. Krempp quien lo había contactado para hacer una estatua del Padre de Foucauld.  Me ofrecí a hacer un modelo para que la asociación que el representaba pudiera elegir entre otros muchos interesante proyectos.
De inmediato busque una cantidad de documentación iconográfica y me sumergí en la lectura de las mejores biografías de Charles de Foucauld y sus meditaciones y notas espirituales. Empecé a comprender y dejar penetrar en mí , este personaje excepcional. Su vida me inquietó.
 Me quedé sorprendido en principio por su vida disipada, seguido de su dramática conversión. Charles me ha tocado el fondo del alma, Sus ojos me traspasaron.
 Yo permanecía en un estado de constante de oración para guiarme en la conformación de la expresión facial, y una tarde, cuando estaba a punto de terminar el modelo, un calor fuerte y repentino me envolvió y yo estaba convencido de la presencia de la Virgen en mi estudio. Confieso que no he dejado de llorar.
La construcción de la estatua comienza con el desarrollo de una estructura de metal que sirve de marco a media tonelada de arcilla que sirve para modelar el perfil de la escultura.
 El hermano Leonardo De Mola y tres hermanitos de Jesús Caritas llegaron del monasterio de la Santa Croce  para darme algunos consejos para con el  diseño.  Luego vino Monseñor Angelo Amodeo, canónigo de la catedral de Milán, que asistió a la beatificación del Padre de Foucauld. Su evaluación del modelo fue muy entusiasta, lo que me consoló grandemente. Poco después, el Maestro Jean Paillot visitó mi estudio y juntos modelamos el rostro del Padre DeFoucauld.
Fotografías del Padre de Foucauld nos muestran a un hombre de tamaño más bien pequeño, envuelto en una áspera y desgastada túnica. Yo he querido representarlo grande, noble y hermoso para que quienes al pasar frente a la escultura se sientan atraído por su santidad.
 Lo que más me importaba era la intensidad de la mirada, dulce, sonriente, amoroso, con este poco de melancolía de los Cielos (que es, sin duda debido a su anhelo ansioso acceso a las visiones beatíficas).  He cambiado varias veces el modelado de los ojos para alcanzar la intensidad de una mirada, humilde y llena de bondad.
Hermana Annette, desde  Roma, me aconsejaba que no me dejara llevar por la imagen idílica del pelo del Padre de Foucauld, porque la foto fue retocada por las monjas con una adición de cabello.
Por otro lado, yo voluntariamente le di al cuerpo leve inclinación con la cabeza inclinada hacia delante con un aire casi cotidiano y con el viento del desierto como símbolo de la inspiración del Espíritu Santo, y para dar más actitud de movimiento, acentuado por un ligero "contrapposto" (balanceo). Al principio, me imaginaba la forma de las sandalias de cuero, pero al esculpir los pies descalzos he querido imaginar su humildad, su pobreza y la semejanza con su Maestro Jesús
Después de la cara, especialmente he trabajado las manos, manos de  en un hombre de oración, y también los pies, los cuales muestran una estabilidad firme e inquebrantable del apóstol en el desierto, y luego las cuentas del rosario, con un bajo alivio de la Virgen y los pliegues de su túnica llena de curvas, aunque con la curvatura suavizada.
 La fusión de bronce, que fue excelente. Para la pátina, he considerado la fachada de piedra arenisca de color rosa de la iglesia de Saint-Pierre-le-Jeune, que se encuentran ligeramente de color bronce.
Esta obra, creada en el silencio de mi estudio me ha cambiado la vida y me acercó más dentro de Cristo, pero también entendí que la belleza siempre será un puente hacia lo espiritual.

Daphne DU BARRY
Dama de la Orden de San Silvestre

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