17 de diciembre de 2009

Siempre de espaldas...

El Pontífice lo sancionó en el "Motu Proprio 'Omnium in Mentem'", difundido este martes. El "motu proprio" es una norma que toma el Papa en forma autónoma y sin consultar a nadie, dictada por escrito, pero sin sello, un tipo de documento con el cual los pontífices intentan mostrar que se mueven por iniciativa propia (motu proprio) y por conocimiento preciso de lo establecido.
El anterior parrafo es parte de la fundamentación que explicita el texto para este documento, pero creo que estamos fuera de la realidad como menos, y para ser respetuoso con este tipo de "dignidades".
Pero me surge espontáneamente la cuestión:

¿Qué hacemos aquí en este campo de misión que se llama Bolivia o en un lugar que reciba cualquier otra nominación, donde las comunidades cristianas se mantienen por obra y gracia de los catequistas, hombres o mujeres que caminan días y días para llevar a otros el conocimiento de la presencia de Dios en la Iglesia y en sus vidas; sin hablar de las hermanitas que llevan adelante esta misión sin ningún tipo de apoyo "eclesial oficial" salvo las conocidas frases de Gracias hermanita y siga así?
¿Qué hacemos en las poquitísimas comunidades en la que no aparece un cura en la vida y sólo las atiende un diácono indígena de tanto en tanto cuándo el tenaz trabajo que realiza para alimentar a su familia le permite tiempo?

¿Qué hacemos en las comunidades donde de tanto en tanto llega un padrecito para dar la misa y llevarse los poco que tienen los comunarios desde su dinerito a sus ovejitas?

Me pregunto ¿realmente saben que pasa en el mundo extra muros vaticanos esta gente? ¿realmente estan tratando de llevar el mensaje del Reino hasta los confines de la tierra?

Y no deseo entar en el tema matrimonial es un bochorno esto, hasta me da ganas de gritar... pare de (hacer) sufrir..... hermano.

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